sábado, 25 de octubre de 2008

La indiferencia del Estado

A mediados del 2004, siete niños fueron infectados con el virus de VIH en la Maternidad de Lima. Uno de los casos más polémicos fue el del hijo de Carmen Guevara (Christian), pues se le realizó una transfusión de sangre que éste no necesitaba necesariamente y, que se le practicó por precaución.

Los médicos utilizaron una bolsa de sangre de 350 mililitros infectada con el Virus de Inmunodeficiencia Adquirida (VIH), ésta fue usada en transfusiones a siete niños y una mujer adulta en la otrora Maternidad de Lima. Hasta hoy nadie ha respondido por las víctimas.
Cuando este hecho salió a la luz pública por Carmen Guevara, el Estado peruano le prometió hacerse responsable de otorgarle una vivienda, empleo fijo, un seguro integral de salud para el niño que consistiría en un tratamiento antirretroviral. Hasta la fecha no se ha visto ninguna iniciativa más que la de entregarle gratuitamente antirretrovirales que por ley se le da a toda persona que tenga este virus, hecho muy angustiante para la familia de Christian.

Cuando Christian cumplió un año de vida, los médicos notaban una normal evolución y concretaron que éste al igual que otro pequeño podían llevar a un estado normal de vida. Pero el virus no es el único problema que posee Christian, además se le ha presentado otras enfermedades, como diversos problemas estomacales, por lo cual Carmen lo lleva continuamente al hospital y esto le genera gastos adicionales, los cuales no puede cubrir.
Otra dificultad es que en las noches Christian no puede dormir, se despierta llorando y, a pesar de que lo han llevado a diversos consultorios, los médicos hasta ahora no dan razón de lo que tiene.

El hijo de Carmen Guevara sufre constante discriminación, por parte de los médicos que se demoran en atenderlo y por los diferentes centros educativos que no lo aceptan por ser portador del mortal virus.

El ex titular del ministerio de salud, Hernán Garrido Leca, se reunión en el congreso con Carmen Guevara para informarle que su caso no iba a ser tomado en cuenta por el Estado en la lista de temas pendientes que éste iba a evaluar para dar una solución al problema.Cuatro años después del lamentable suceso en la otrora maternidad de Lima, solo tres de los siete niños infectados con el virus de VIH quedan con vida y hasta ahora lo único que ha hecho el gobierno es hacer oídos sordos a los pedidos de los afectados para que se haga justicia y se cumpla lo que el Estado prometió.

No hay comentarios: