UNA RED CARRETERA EFICIENTE

Integración, comercio, desarrollo, comunicación y exportación son solo alguno de los beneficios que los nuevos ejes viales en construcción reportarán al país. Las concesiones ya entregadas, así como los proyectos del Ministerio de transporte y Comunicaciones y diversos operadores privados, abren prometedoras oportunidades para el futuro del país.

Hablemos específicamente de la carretera Interoceánica. Actualmente en plena ejecución, este enorme eje de desarrollo permitirá impulsar enormemente el intercambio entre Perú y Brasil y le abrirá a este las costas peruanas, codiciado acceso a la Cuenca del Pacífico, al mismo tiempo el Perú podrá facilitarse el acceso a los mercados europeo y africano. Este proyecto supera los US$ 900 millones, consiste en tres tramos que vinculan las ciudades de Ilo, Matarani y San Juan de Marcona, en el Perú, con el estado amazónico de Acre, en el Brasil, para ello se han debido construir y rehabilitar 2603 kilómetros de carretera, divididos en cinco tramos. Los principales financiadores son el Banco Nacional de Desarrollo de Brasil y la Corporación Andina de Fomento. Esta también es una gran oportunidad para el turismo pues los 800 mil habitantes de Acre tendrán las puertas abiertas para visitar las zonas de Madre de Dios, Cusco y Puno.

El 2008 se percibe como un año positivo para las empresas constructoras. Al respecto, el director superintendente Odebrecht Perú, jorge Barata, comentó que estos proyectos se impulsarán aún más con el TLC con Estados Unidos y la consiguiente mejora de las inversiones.
En el Perú existe cerca de mil empresas constructoras y muchas de ellas están interesadas en las grandes concesiones que se vienen planteando en la actualidad, tales como el proyecto de mejorar las vías Ica – Lima y la carretera Pativilca – Sullana.

La finalidad del MTC es integrar interna y externamente al país, vinculando las áreas de recursos para una mejor regulación, promoción y supervisión de las innovaciones necesarias en lo que respecta a la infraestructura y servicio de transporte y comunicación.

La carretera interoceánica va a ser la herramienta que sin duda nos va a convertir en un país bi-oceánico y eso nos podría beneficiar económicamente a todos, pero más a los empresarios que podrían utilizar esta vía como intercambio, y no para un ciudadano común y corriente pues, éste tendría que pagar cada cierto tramo de recorrido un peaje que sería uno de los más caros del mundo. Hasta hace poco se pagaba un peaje por transitar un tramo de poco menos de kilómetro y medio en la avenida Elmer Focett, en el Callao. Sin duda la creación de esa “carretera” fue para beneficiar solo a una empresa argentina, un claro ejemplo de cómo nuestra clase política maneja una idea de lo moderno que implica la modernización de las vías terrestres, pero lo hacen por sobre las verdaderas necesidades de la población contaminándose de corrupción.

El señor jorge Barata comenta que los proyectos para hacer más autopistas en Lima se aumentarán con el TLC, pero ya faltan pocos meses para que entre en vigencia este dicho tratado y se va a poder comprar autos estadounidenses a costos muy bajos y por ende nuestro parque automotor va a sufrir una transformación mayor a la que actualmente se está experimentando. En el primer semestre de este año se han adquirido más autos que en todo el 2005, incluyendo los obtenidos por el Estado y los particulares. Sin duda esto va a generar un caos porque nuestro sistema vial no está sufriendo las transformaciones que verdaderamente necesita para soportar el tránsito de miles de automóviles para transportar a más de 7 millones de habitantes sin contar con los turistas que se espera vengan masivamente a partir del próximo año.

Un hecho que empeoró nuestra actual situación fue que en el gobierno de Alberto Fujimori se importaron las famosas combis y ticos, vehículos que se utilizaban para el transporte dentro de una fábrica pasan a ser ahora para el transporte público ocasionando el desastre que todos conocemos: accidentes automovilísticos y una ciudad muy fragmentada, además se dieron permisos para que éstos circulen por toda la ciudad de Lima, lo que ocasionó que el valor de las viviendas no sea el real y se devaluaran. De esta manera podemos salir a la esquina de nuestra casa y subirnos a una combi que sin duda nos llevará a donde queramos porque pasan por toda la ciudad. No existe un lugar establecido del privilegio como si lo hay en otras grandes ciudades de América Latina y sin duda en Europa. Lo que encontramos en Lima es un desorden insufrible, pareciera que la avenida Javier prado fuese construida para separar la ciudad de Lima en dos partes, una para ricos y otra para los demás, por una lado tenemos a los distritos más acaudalados y por otro a todo el norte de Lima.

El transporte vial es uno de los principales problemas que enfrenta el país que no tiene una red ferroviaria muy desarrollada y que esperamos se vea un poco más aliviada con la construcción del Metropolitano, que uniría el sur y el norte de la ciudad. Estamos todavía lejos de lo que sería una ciudad moderna pero aún así nos esperan los beneficios del tratado de libre comercio que nos traerá más caos. Lo que debería hacer nuestra clase gobernante es priorizar nuestros intereses y preocuparse por ser verdaderamente representativos de los intereses del ciudadano que los escogió.